Durante media década practiqué jiu jitsu. Sin falta, 3 veces a la semana.
Tuve que dejar por temas personales pero me encantaba.
Un gran deporte que conlleva mucho esfuerzo y entrega.
Cuando comencé quería hacer todo aquello que se veía en Youtube.
En aquella época las MMA y todo lo que ahora está de moda no estaba de moda.
Conocí el deporte por accidente en Youtube.
Cuestión que quería hacer todas esas técnicas que veía, eran básicas… pero me encantaban.
Después de dos años de entrenamiento… me fallaban, cada lucha que intentaba finalizar con esas técnicas la perdía.
Habían otras más rudimentarias, menos vistosas que me salían genial, pero las que yo quería no me salía.
Ya habían pasado 2 años desde que había comenzado pero no graduaba nunca (pasar de cinturón).
Y las luchas las ganaba cuando usaba las técnicas rudimentarias, las perdía cuando intentaba hacer las otras.
Un día fue el colmo. Graduaron compañeros que habían empezado después que yo.
Estaba furioso, conmigo, con el jiu jitsu con todos. No solo me ganaba gente que emepzó después que yo… también graduaban antes que yo.
Le pregunté a mi entrenador “¿Porqué el resto mejora y yo estoy estancado?”
Y me respondió “Vos también mejoraste pero estás empecinado en usar lo que no te funciona”.
Ouch eso dolió un poco.
Pero le dije que esas técnicas que quería hacer fueron por las que empecé a hacer jiu jitsu.
Me dijo que me tenía que centrar en lo que me funcionaba. Todos somos distintos y tenemos diferentes fortalezas.
Algunos tienen facilidad para unas cosas, otros para otras, lo hermoso del jiu jits… de la vida
Ahí fue cuando comencé a ganar. Explotando lo que se me daba bien.
La mayoría en Tinder hace lo mismo que yo hacía en jiujitsu.
Suben fotos donde “se ven lindos”, intentan seducir con “belleza”.
Pues déjame decirte que hay chicos que son más atractivos que tú.
Yo lo sé, jugué ese juego y lo jugué bastante bien… pero siempre sentí que me quedaba como con “las sobras” que dejaban otros.
Cuando comencé a hacer lo mismo que en jiu jitsu y me enfoqué en mis fortalezas mi historia en Tinder cambió.
Fortalezas que por cierto, a diferencia del atractivo físico, todo ser humano posee, nacemos con ellas.
Pero están todos tan enfocados en verse bien que nadie las usas… y por eso funcionan tan bien.
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Lea
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