A los 19 años trabajaba como diseñador en una agencia que hacía páginas WEB para empresas.
Era un lindo lugar, mi novia de ese entonces me había regalado una planta para que me acompañara en mis jornadas.
Era una planta muy común, que se encuentra en cualquier hogar y que poca gente sabe es venenosa.
En esta empresa había un vendedor que era un genio vendiendo.
Un crack, podía vender hielo a esquimales, o estufas a árabes.
Todo ese mundo era desconocido para mi, me producía admiración que alguien tuviera ese talento.
Una vez le pregunté cual era el secreto para vender.
Me dijo:
“Imagínate que están arreglando las cañerías del edificio y no hay agua”…
Me dió un vaso de agua y me dijo: “Vendemelo”.
Le empecé a balbusear que el agua que tenía era una agua 100% pura,
que además se conservaba en ese vaso que era un vaso especial que se había construído para mantener su pureza.
Que por solo 100 pesos iba a poder disfrutar de un agua exquisita y pura.
Me dijo “No tengo sed”.
Después me dijo que no hay que mentir para vender, que eso no se hace, un pequeño regaño.
– “¿Cuando te vendieron esa planta? ¿Te mintieron?”.
– “No creo ja, me la regaló mi novia que sabe mucho de esos temas, le encantan las plantas”.
– “Se nota es una planta muy linda, debés cuidarla con mucho amor”.
– “Si claro, me mantiene conectado con mi novia”.
Hablamos un poco más de mi novia, la planta y como sentía que esa planta nos mantenía conectados mientras trabajaba.
Cuando se estaba por ir le digo “Ey pero como venderías vos el vaso de agua”.
Y me dice: “En realidad ya te lo estaba vendiendo”.
No tenía idea de lo que me decía.
Me miró con una sonrisa y me dijo:
“Esa planta es una Difenbaquia, y esos puntitos blancos que parece polvo que ves ahí, es que está deshidratada, se está muriendo”.
No sé que cara puse pero me exaltó su comentario, miré la planta y si que tenía ese polvito blanco.
Si se me moría la planta y mi novia se enteraba iba a parecer que ella no me importaba.
Solo llevábamos 2 meses como novios…
– «Entiendo que estás ocupado y por eso la descuidaste, tranqui, no se va a morir, solo requiere un poco de atención extra por unos días . Vas a seguir conectado con tu novia mientras trabajas»…
Junto a esas palabras me regaló una sonrisa tranquilizadora.
Agarré el vaso de agua para regar la planta y empezar a salvarla:
“Lea, son 30 pesos el vaso de agua”.
Me reí, un poco de los nervios y otro poco por que pasé a ser su cliente sin siquiera darme cuenta, le di los 30 pesos y regué mi plantita.
Pues eso que por primera vez experimenté de uno de los mejores vendedores que conocí en mi vida…
es clave para que puedas hacer match con las mujeres que te gustan en Tinder.
Es el principio con el que optimizamos perfiles en la última lección del módulo 1 del CURSO PARA CONOCER CHICAS POR TINDER.
Gracias a esa optimización final es que podrás conocer a las chicas que más te gustan.
Esas con las que hoy en día crees que no podrás salir… pero con las que saldrás.
Solo ese video del curso vale lo que todo el curso entero: U$S 90.
Unos 360 dólares menos que cursos similares que no te enseñan ese tipo de cosas.
Y cuando me refiero a las chicas que te gustan me refiero a chicas como la modelo fitness que VISTE en el video que te pasé con mi perfil del vagabundo.
Adquiérelo y comienza a disfrutar de las bondades de las apps de citas.
Abrazo
Lea
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